POEMA A DÚO CON BLUE EYES Y DOMINGO SÁNCHEZ - LOVERMAN.

POEMA A DÚO ENTRE BLUE EYES Y DOMINGO SÁNCHEZ - LOVERMAN.


BLUE EYES
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Bien cierto que hay hechos con el poder de mermar,
tanto como para dejarnos perplejos;
tales como esa frase hecha
o refrán, que dice:

"lo que sobra no obvia lo que falta"

como también:

"la noche consigue brillar, más
gracias a tanta oscuridad en el pecho de los hombres".


Sí, palabras que enganchan
y, a menudo, demasiado tristes.


Eso, lamentablemente, no lo podemos cambiar
por estar intrínsecamente colocado en las formas de la vida;
pero sí agregar esos granos de arena, nuestros
gracias a esos designios que, también,
nos llevaron a dejarnos conocer.



Granos y granos que, sumados,
han hecho dunas, montañas, colinas

ojalá todos encontraran la suya
un lugar perfecto, un tesoro
una mujer como tú...



Sabes del lugar, un montículo verde,
ese paréntesis en nuestras vidas

donde sacas una toalla de tu bolso
la estiras sobre un césped que parece irreal
y, en el cual, me pongo a leer

en el cual te recito
en nuestra íntima burbuja, donde te deshaces
una vez te consigo rajar
y te abro desde el pecho a la espalda.


La vida, allá
toma los derroteros de sentir todas las palabras,
sumar, positivarlas



allá somos ese "a pesar de todo"
y más
viendo los temas de la existencia
a través de poemas y desde el punto de vista
que escogieron para cerrar sus ojos
y dormir las olas.



Allá, hemos hablado de filosofía de vida
y de lo grande que es,
al permitirnos la oportunidad de vivirla.


Allá, ya has visto que hasta el mar
se ha confabulado con nosotros
trayendo más arena a nuestra playa,
y eso, para los que saben leer entre líneas,
siempre quiere decir algo

¿No crees, BLUE EYES?
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Domingo Sánchez - Loverman
poemas registrado.

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POEMA DE "BLUE EYES"


YO SÉ
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Yo sé de una colina verde
donde la magia se convertía en tiempo presente
y donde aprendí a escucharte conjugar verbos con aromas.


Sé de sentir emociones a dos
y de compartir versos, silencios y lágrimas.


Sé de ilusiones y de dolor, de ansias y de bálsamos,
de sed y de ardor…

Sé…. yo sé.

Yo sé de una colina verde acariciada por su mar
día a día, hora tras hora
en un baile explosivo y dulce
alternando compases, contando olas…
una, dos tres… hasta aquella, su séptima ola.


Ahora la colina permanece erguida en su sitio
menos verde, quizás, hace frío,
pero segura de su lugar, confiada en su forma,
ahí es donde ha de estar.
Parece que la playa a sus pies ha crecido, pero no,
el mar no llega a ella porque se ha retraído.
llenando otras playas, disparando surfistas en su lomo
repartiendo sus espumas y sus olas, impetuoso y bravo
y así ha de ser, porque el mar no puede ser cercado
como por no poder, no se pueden poner puertas al campo.


De vez en cuando una ola audaz
vuelve a rozar la colina, que sonríe al contacto,
recordando lo que fue ….y ahora casi no es.


No hay dolor ¿sabes? no hay a qué aferrarse porque siempre, siempre,
lo que ha de ser …es
y contra eso nada puede hacerse.



Mientras la colina que espera la vuelta del mar
se ofrecerá a los amantes en sus misterios
a los solitarios en sus quimeras
y a los soñadores por su altura
para que lo admiren a él, a su mar,
a ese que, cuando está, la hace sentir nueva.
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...simplemente...BLUE EYES.